El destello es el bar del que todos hablan en la escena porteña, y esto tiene un por qué: se trata de la primer cervecería ambientada íntegramente en los años ´80s, que va a lograr que viajes en el tiempo hacia tu adolescencia si tenés más de 30, o conozcas una época dorada si andás cerca de los 20. Al entrar, te vas a sentir en un capítulo de Stranger Things, si te sirve de referencia. Luces de neón, y una selección de 10 arcades originales para que juegues hasta el cansancio, con los juegos clásicos que todos amamos: Street fighter, Mortal Kombat, Galaxian, Pacman, Wonderboy…. Una locura de fichines que te van a hacer delirar y pedir un ratito más en el bar como si fueras un pibe! Pero como si esto no fuera suficiente, además vas a encontrarte con ET en tamaño real en la caja, listo para tomarte el pedido, algunos elementos de Volver al futuro, como un condensador y un Delorean increíble en una de las paredes, y toda la cartelería en letras de video juegos, con algunas sorpresas en los baños que dejamos para que las vayas a buscar y te diviertas! Todo el combo hace que visitar El destello sea una experiencia increíble, que los dueños del bar quieren que disfrutes.
Los chicos tienen 10 canillas: 8 de birra (de marcas como Kaleff, Darwin, Gres, Charlone y Mur, entre otras), una de sidra y una de vermú de Café San Juan. El detalle: cada pinta de birra sale con 2 fichas para jugar en los arcades! Así que preparate para viciar a lo loco en El destello! Si estás con ganas de otra cosa, también vas a encontrar tragos clásicos en la barra del bar. Para comer, si bien tiene pocas opciones, hay para todos los gustos y el menú es más que cumplidor.
Nosotros arrancamos con una Blonde de Kaleff (dorada, de espuma poco persistente pero que deja un lindo encaje en el vaso, maltosa pero suave, de final seco) y una APA de Charlone (dorada, de espuma cremosa, de aroma y notas en boca cítricas y a frutas tropicales, de mucha tomabilidad). Los acompañamos de unos Chipá con sriracha, que salen bien calentitos, con la salsita para mojarlos, y son riquísimos! Ideal para una merienda birrera!
Seguimos con una American IPA de Gres (dorada, cítrica en aroma y boca, liviana y muy fácil de tomar) y una Scottish de Kaleff (amarronada, de aroma tostado, en boca maltosa con notas dulces y final seco) y unas Empanadas Double Dragon: salen 6 empanaditas chiquitas y hojaldradas (2 veggies, 2 de chorizo y 2 de morci), son una fiesta de ricas y están bien rellenitas! Así que perfectas para empezar la noche.
Jugamos unos fichines en el entretiempo, y vimos que los chicos de El destello pensaron en todo: al lado de cada arcade hay una mesita para que apoyes la birra mientras te volvés loco jugando! No queremos ventilar los trapitos al sol, pero nos animamos a decirles que hubo pica en el equipo de GPS y pronto vamos a volver por la revancha!
Para recargar pilas, pedimos un Pancho alemán de Lanús ( sale con chucrut, pepinos y mostaza y está buenísimo!) y un Sandwich El destello (rosbif desmenuzado, danbo, y salsa BBQ con Bourbon que es una locura de rica. Nos encantó, aunque le agregaríamos algún vegetal que le aporte frescura, porque somos un toque fanáticos del balance en los sandwiches bomba como estos!). Salen con papas que estaban bien sequitas, que tienen una especie de frosty de curry encima que les queda perfecto! La presentación también es divina, en bandejas con los dips aparte, y las porciones están muy bien de tamaño! Los acompañamos de una English IPA de Darwin (ámbar, con notas florales que balancean con terrosas sobre el final, amargor moderado) y una Honey de Darwin (dorada, de aroma alcohólico, dulce pero de final seco).
Cerramos la noche con una Weizen de Darwin (dorada, turbia, una birra típica de trigo, bien fresca y muy bien lograda!), una Stout de Kaleff (negra intensa, liviana en cuerpo, en boca café tostado y notas a caramelo. Nos gustó mucho!) y el Vermú de Cafe San Juan (power y suave a la vez, amargo y cítrico, nos encantó!).
El destello es la primer cervecería ambientada en los años ´80s, con 10 arcades clásicos, elementos de películas ochentosas que te van a volar la cabeza, luces de neón, y mucha buena onda. Con 10 canillas, un menú reducido pero rico, cumplidor y con productos frescos, este bar se propone que vivas una experiencia diferente y definitivamente lo logra! Ya sea porque rondás los 30 y te lleva hasta tu adolescencia, o porque andás por los 20 y te copa lo vintage, no vas a poder parar de visitar este bar!
Gracias a los chicos de El destello por invitarnos a conocerlos, en especial a Esteban por cenar con nosotros y compartir tantas anécdotas del pueblo! En breve volvemos a visitarlos y a jugar unos fichines! Salud! GPS BIRRA
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