Dewey

En el corazón de Adrogué, con un local chiquito, lleno de mesas comunitarias en la vereda, una barra amplia, y una pizarra de azulejos blancos que va a captar toda tu atención, a principios de 2018 abrió sus puertas Dewey, la casa abierta al público de esta fábrica que lleva ya 9 años haciendo birras.

La propuesta del bar es bien sencilla: 10 canillas de cerveza artesanal (7 propias y 3 invitadas de marcas como Guten Bier, Norfolk, Astor, Buena Birra Social Club, Broers, Gres, entre otras) y para comer, diferentes opciones de picada y snacks. Podés pedir inclusive delivery del morfi que quieras para comer en el local, tomando unas buenas birras. Con buena música de fondo, y un ambiente súper relajado, los chicos de Dewey se proponen que salgas de tu rutina y disfrutes de un buen momento en su bar.

Nosotros arrancamos con birras de la casa: una Honey (dorada, notas a miel en aroma que te van a volver loco, en boca notas dulces, de final seco. Es una de nuestras Honey preferidas porque está muy bien lograda, así que aplaudimos a los chicos de Dewey por eso!) y una Nitro Pale (rojiza, de espuma híper cremosa que es una locura, con notas a caramelo tostado en boca, de amargor moderado. Una fiesta!), mientras comimos unos maníes que salieron de cortesía y empezamos la charla con los chicos de la barra.

Para comer, probamos todo lo que ofrecen los chicos y nos armamos una mega picada! Pedimos la tabla, que sale con jamón cocido, jamón crudo, queso, roquefort, y tostadas; le agregamos unos nachos con cheddar, unas cazuelas de aceitunas rellenas con roque, parmesano o almendras, y unas cazuelas de salchicas BBQ. Todo sale presentado divino, en porciones justas para el precio, y es todo riquísimo! Acompañamos la picada de dos rondas de birras, y tomamos una Golden de la casa (dorada, bien suave, maltosa y de mucha tomabilidad. Ideal para aquellos que están inciándose en el mundo de lo artesanal), una Hoppy Ginger de Astor (dorada, en boca el jengibre te va a knockear, picantona, cítrica, de final seco. Riquísima!), una Weiss de la casa (dorada, de espuma cremosa, con notas especiadas. Una birra de trigo súper prolija) y una Session IPA de la casa (ámbar clara, de aroma floral, en boca las notas florales dan lugar a resinosas, de amargor moderado).

La próxima ronda siguió con parte de la historia de Dewey, que se remonta a 2009, cuando César empezó a hacer cerveza como hombrewer. Primero en su casa, con anécdotas como dormir con la birra fermentando al lado de su cama, y luego en el galpón de su abuelo, este loco de la cerveza artesanal cocinaba con mucha pasión y dedicación, como un hobbie, ya que sostenía sus otros trabajos. Pensó en dejar de cocinar muchas veces, pero nunca pudo contra su amor por la cerveza, y finalmente conoció a Pablo y Santiago, sus socios en la fábrica, el bar y la vida, y juntos armaron este proyecto que viene creciendo tanto y dándoles tantas satisfacciones. Cerramos la noche con una Scottish de Norfolk (rojiza, notas a caramelo tostado en boca, dulzona, de final seco, y casi nula formación de espuma), una IPA de la casa (ámbar, de espuma cremosa, balanceada entre floral, resinosa y maderosa, de amargor elevado. Una locura de lúpulos!), una Cryo IPA de Guten Bier (dorada, de aroma cítrico, en boca notas cítricas que balancean con resinosas, una IPA “liviana”, que te va a invitar a repetirla!) y una Porter de la casa (negra, de espuma amarronada, aroma tostado, en boca notas tostadas y a chocolate, borrachita, muy buena!).

Con un bar con 10 canillas de muy buenas birras propias e invitadas, con una propuesta de morfi bien sencilla y la posibilidad de pedir delivery al local, con buena música de fondo, y un ambiente súper relajado, los chicos de Dewey se proponen que salgas de tu rutina y disfrutes de un buen momento en su bar, y sin dudas lo logran!

Gracias a los chicos de Dewey por invitarnos a conocerlos, en especial a César por quedarse a cenar y charlar con nosotros! Se viene en breve la visita a la fabrica! Salud genios! GPS BIRRA