En una casa antigua en el barrio de Villa Urquiza, con una onda de casa cultural, está Cufré: una cervecería con mesas altas y banquetas para compartir, mucho arte en las paredes, un ambiente súper cálido que se respira apenas entrás, y música tranqui sonando de fondo.
Este bar que abrió sus puertas hace poco más de un año, debe su nombre a un pueblo uruguayo de 30 habitantes, de donde es Bruno, uno de sus dueños. Él es diseñador gráfico, y a eso se debe la orientación artística del local. En Cufré se trata entonces de volver un poco a las raíces.
Vas a encontrar 10 canillas de cerveza artesanal, de marcas como Portlander, Brescia, Gaukler, Kellan, Haffer, entre otras. Siempre tienen una canilla rotativa que tiene como objetivo abrir las puertas a fábricas cerveceras del barrio y de amigos, por lo que siempre vas a encontrar alguna sorpresa en la pizarra. En Cufré, además, tienen un pasaporte que podés ir sellando cada vez que los visitás, cada 5 sellos, te regalan una pinta!
La carta de comida te va a volver loco, porque tienen opciones bien caseras y algunas súper originales. Los platos incluyen papas al horno tuneadas, nachos, pizzas rústicas, provoletas, panchos, sandwiches, tablas de picadas, y en la carta vas a encontrar al lado de cada uno, la opción de cerveza con la que te recomiendan maridarlos. Punto extra para los chicos de Cufré por eso!
La atención es impecable y súper personalizada. Cuando llegás y elegís mesa, te asignan un mozo que se va a asegurar que no te falte nada en toda la noche!
Nosotros arrancamos por unas birras, que salieron acompañadas de palitos salados de cortesía. Tomamos una Session IPA de la casa (dorada, con suave olor cítrico, en boca el sabor lupulado le da lugar a un amargor moderado. Una excelente birra! Prometimos a algunos habitués de Cufré que íbamos a pedir que esta canilla se vuelva estable, y acá estamos dejando registro oficial del pedido!) y una India Red Ale de Gaukler (rojiza, de espuma cremosa, con aroma alcohólico y a caramelo tostado, en boca notas a malta y a caramelo, de amargor medio. Nos gustó mucho y la sumamos a nuestra lista de preferidas!).
Para comer, probamos un surtidito de la carta, y vale aclarar que todo lo que comimos eran medias porciones (así que vayan con hambre!):
- Papas al horno con frutos de mar: Salen en una cazuela de barro, gratinadas con queso y desbordadas de frutos de mar. Son una delicia!! Mojalas en la salsita que queda en el fondo de la cazuela y después nos contás. Un camino de ida, por el que vamos a volver a Cufré sin dudas!
- Pizza con vegetales: una pizza veggie con masa casera y súper sabrosa, que tiene muzzarela, berenjenas, zucchinis, tomates cherry, champignones, rúcula, cebolla morada, morrón… Animate que está buenísima!
- Sandwich de Salmón: viene con crema de ciboulette, salmón ahumado, palta y rúcula. El pan es casero, el dip de ciboulette tiene un poquito de roquefort que queda increíble con el salmón. Sale con un mix de verdes o papas a elección. Nos pareció riquísimo y súper fresco, ideal para el veranito!
La presentación de los platos, como podrán ver en las fotos, es absolutamente increíble! La comida te entra por los ojos y no te defrauda cuando das el primer bocado. Aplausos para el chef de Cufré! (Les juro que lo abrazamos fuerte cuando pasó a saludarnos!)
Acompañamos la cena de una IPA de Portlander (dorada, de espuma poco persistente, con aroma cítrico, y de amargo alto. Ya saben que nos gusta mucho esta birra!) y una Golden de Drawen (dorada, suave, una cerveza rubia tradicional).
Cerramos la noche con una chocotorta, que sale en un frasco de mermelada enorme, así que compartan gord@s porque si no la van a quedar en Cufré! Saben que amamos que los bares ofrezcan opciones dulces, pero en este caso nuestro amor se disparó a niveles altísimos, esa chocotorta es un pedazo de cielo hecha postre! Cremosa, dulce pero no empalagosa, perfecta! Nos quedamos con las ganas de probar el cheesecake porque se habían terminado (snif snif), pero nos alegra tener excusa para volver! La acompañamos de una Tripel de Goyeneche (dorada, dulce, con aroma y sabor a manzana roja) y una Scottish de Kellan (rojiza, algo turbia, maltosa, con notas a caramelo tostado).
Al lado de un mega bar, Cufré es una cervecería que podría pasar desapercibida, y sin embargo logra destacarse. Una oferta gastronómica impecable, una selección de buenas birras, excelente atención y un ambiente súper cálido y distendido, van a hacer que te enamores del lugar y te vuelvas habitué, sin importar si sos del barrio o vivís lejos.
Gracias a los chicos de Cufré, en especial a Bruno por invitarnos a conocerlos y a Álvaro por atendernos como reyes!! La pasamos increíble y ya queremos volver a seguir probando las delicias que sirven en el bar! Salud amigos! GPS BIRRA
GPS BIRRA 
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